Scott Gurney se tomó un tiempo para considerar sus opciones antes de recibir el premio y guardó el boleto en un cajón donde ocasionalmente lo miraba.
Un contador y planificador financiero de Sídney que ha ayudado a clientes a administrar su dinero durante 33 años puede necesitar ayudarse a sí mismo después de ganar el premio mayor de Lotto Max de $55 millones.
Es el premio mayor más grande jamás ganado en la isla de Vancouver y el segundo más grande de la provincia.
Scott Gurney, de 58 años, maneja números todos los días, pero dice que incluso tuvo que sentarse cuando vio la cantidad de ceros en el dinero del premio.
«Llamé a mi asistente en mi oficina y primero leí el número en mi teléfono por $55 000. Luego me di cuenta de que decía $55 millones, y no pudimos hacer nada en todo el día».
Era el día después del sorteo del 28 de febrero, pero no tenía prisa por anunciar públicamente su victoria mientras sopesaba sus opciones. El boleto de $55 millones languideció en una rifa cerrada en su oficina, aunque admite que lo abre de vez en cuando solo para mirarlo.
Durante el último mes, se ha vuelto cada vez más difícil guardar un secreto, ya que ha revelado su riqueza a sus amigos, clientes y familiares.
Gurney dice que ha estado comprando boletos de lotería desde que tenía 19 años, pero no con regularidad. El día que compró el boleto ganador, estaba haciendo algunas compras en Save-On-Foods en Beacon Street en Sydney. Era un día largo y se estaba haciendo tarde, pero decidió comprar un boleto de todos modos.
Gurney, que es soltero, dice que siempre toma números generados al azar por una máquina de lotería y nunca compra extras. «Me gustan los buenos números redondeados», dijo. «A veces opto por el Mega Pack de $20, que automáticamente me da Lotto Max Extra de todos modos».
En cuanto a sus planes para el dinero, que él sabe muy bien que lo colocarán automáticamente en la categoría impositiva del 53 por ciento, el planificador financiero dice que tiene la intención de «detenerlo» por ahora.
Evidentemente, nadie va a abandonar a sus clientes en plena temporada de impuestos, esperarán hasta que termine para embarcarse en algunos viajes alrededor del mundo, esperando finalmente pasar seis meses en casa y la otra mitad del año. de viaje.
“Todos soñamos con lo que haremos si ganamos, pero una vez que pasa, te hace replantearte todo”, dijo. «Cuáles eran mis planes hace seis meses serán significativamente diferentes dentro de seis meses».
Si bien decidió jubilarse, «sin duda, esta será mi última temporada de impuestos», planea contratar a alguien para que continúe atendiendo a sus clientes contables.
Al mostrar su cheque el martes, Gurney señaló que él y su familia han apoyado causas locales a lo largo de los años, y que planea continuar haciéndolo, donando potencialmente algunas de sus ganancias inesperadas a organizaciones benéficas como el Saanich Peninsula Hospital y el BC Children’s Hospital.
“No se me ocurre nada mejor que ayudar a los niños”, dijo el millonario más nuevo de la isla de Vancouver.
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