ruso Las tropas capturaron la planta de energía nuclear más grande de Europa después de atacarla el viernes por la noche, provocando al menos un incendio, dijeron las autoridades con la invasión. Ucrania Entró en su segunda semana.
La Inspección Estatal de Energía Nuclear de Ucrania dijo que las fuerzas militares rusas ocuparon la planta de energía nuclear de Zaporizhzhya, cerca de la ciudad de Energodar, luego de confirmar que no hubo cambios en los niveles de radiación luego de intensos combates y bombardeos de la planta.
Las autoridades confirmaron que los ataques provocaron un incendio en un edificio de oficinas cercano fuera del perímetro de la estación. El fuego se extinguió horas después, pero aun así generó una creciente preocupación por los niveles de radiación y un posible evento nuclear.
Las principales autoridades nucleares del mundo dijeron que están preocupadas, pero no en pánico, por el daño a la planta de energía, que proporciona alrededor de una cuarta parte de la generación de energía de Ucrania.
El regulador ucraniano dijo que el personal de la planta aseguró su operación segura y la condición de las seis unidades de energía, de las cuales solo una estaba en funcionamiento. El resto estaba fuera de línea o enfriado.
Rusia y Ucrania acuerdan corredores de evacuación mientras la invasión entra en la segunda semana
El video en vivo de la pelea nocturna mostró un edificio en llamas y una andanada de proyectiles, antes de que una gran bola de cera iluminara el cielo, explotara junto a un estacionamiento y arrojara humo por todo el complejo.
«Europeos, por favor despierten. Díganle a sus políticos: las fuerzas rusas están disparando contra una planta de energía nuclear en Ucrania», dijo el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky en un discurso en video mientras advertía sobre la posibilidad de una catástrofe catastrófica.
Zelensky dijo que los tanques rusos dispararon contra plantas de reactores nucleares, aunque no había evidencia de que fueran alcanzados.
En una publicación en línea, el alcalde de Energodar, Dmytro Orlov, dijo que estallaron feroces batallas entre las fuerzas locales y rusas en las afueras de la ciudad antes del ataque a la fábrica, y agregó que hubo víctimas sin dar detalles.
La Agencia Estatal de Servicios de Emergencia de Ucrania confirmó más tarde que se había producido un incendio en un edificio de formación fuera del perímetro de la fábrica. El bombardeo continuo impidió que los bomberos llegaran al fuego durante horas, y los fuegos fueron finalmente extinguidos después del amanecer.
La agencia confirmó que no hubo heridos.
La Agencia Internacional de Energía Atómica dijo que los funcionarios ucranianos le dijeron que ningún equipo «esencial» en la planta se vio afectado por los ataques o los incendios resultantes. Agregó que los reguladores ucranianos indicaron que no hubo cambios en los niveles de radiación.
Andrei Tuz, un portavoz de la planta nuclear, dijo a la televisión ucraniana que los proyectiles cayeron directamente sobre la instalación e incendiaron uno de sus seis reactores. Dijo que el reactor está en renovación y no está funcionando, pero tiene combustible nuclear adentro.
El ministro de Relaciones Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, dijo en Twitter que las fuerzas rusas estaban «disparando desde todos los lados» en la estación. Hizo un llamado a los rusos para establecer una zona de seguridad y permitir el paso de los bomberos.
La Casa Blanca dijo que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, habló con Zelensky sobre la situación en la planta e instó a Rusia a detener todas las actividades militares en la región.
El comunicado de la Casa Blanca agregó que Biden también está en contacto con funcionarios de energía de EE. UU. sobre la situación.
El primer ministro Justin Trudeau habló con Zelensky y con la viceprimera ministra Chrystia Freeland.
“Estos ataques inaceptables de Rusia deben cesar de inmediato”, escribió Trudeau en Twitter.
Su oficina de prensa dijo que el primer ministro británico, Boris Johnson, quien también habló con Zelensky, condenó el ataque ruso y convocó una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. Rusia actualmente preside el consejo.
La secretaria de Energía de EE. UU., Jennifer Granholm, dijo en Twitter que los reactores en la planta de Zaporozhye estaban «protegidos por estructuras de contención robustas y los reactores están cerrados de manera segura». Ella dijo que había hablado con su homólogo ucraniano sobre la situación.
Los primeros informes sobre el accidente en la planta de energía impulsaron los mercados financieros en Asia, con una caída en picado de las acciones y un aumento aún mayor de los precios del petróleo.
Un video mostró llamas y humo negro sobre la ciudad de Energodar, hogar de más de 50.000 personas, mientras la gente pasaba frente a autos destrozados, solo un día después de que el organismo de control atómico de las Naciones Unidas expresara su grave preocupación de que los enfrentamientos pudieran causar daños colaterales. En 15 reactores nucleares en Ucrania.
Rusia ya ha capturado la extinta planta de Chernobyl, a unos 100 kilómetros (62 millas) al norte de la capital de Ucrania, Kiev. Algunos analistas señalan que la planta de Zaporizhzhia es de un tipo diferente y más segura que Chernobyl.
Las sanciones aumentan a medida que continúan los enfrentamientos
La invasión de Ucrania entra en su noveno día. Se cree que miles de personas murieron o resultaron heridas en el mayor ataque a un país europeo desde la Segunda Guerra Mundial, provocando un millón de refugiados, golpeando la economía rusa y temiendo un conflicto más amplio en Occidente que no se había contemplado durante décadas.
Los negociadores de Rusia y Ucrania acordaron el jueves la necesidad de corredores humanitarios para ayudar a los civiles a huir y llevar medicinas y alimentos a las áreas donde los combates han sido más intensos.
El asesor del presidente ucraniano, Mykhailo Podolyak, dijo que también era posible un cese temporal de las hostilidades en lugares seleccionados.
Podolak fue citado por la agencia estatal de noticias Belta diciendo que los negociadores se reunirán nuevamente la próxima semana.
Solo una ciudad ucraniana, el puerto sureño de Kherson, ha caído en manos de las fuerzas rusas desde que comenzó la invasión el 24 de febrero, pero las fuerzas rusas continúan asediando y atacando otras ciudades.
Mariupol, el principal puerto del mar de Azov, fue acordonado y fuertemente bombardeado. Se cortaron el agua y la electricidad, y las autoridades dicen que no pueden evacuar a los heridos.
Un video publicado en Twitter por Mariupol y verificado por Reuters mostraba vehículos estacionados en llamas mientras disparos incesantes reverberaban alrededor de los edificios de apartamentos circundantes.
La ciudad nororiental de Kharkiv ha estado bajo ataque desde el comienzo de la invasión, pero los defensores de los derechos humanos aún resisten en la ciudad fuertemente bombardeada.
Si bien no se lanzó ningún ataque importante contra Kiev, la capital fue bombardeada y las fuerzas rusas desataron una potencia de fuego devastadora para romper la resistencia en la remota ciudad de Borodinka.
En Washington, un funcionario de defensa estadounidense dijo que las fuerzas rusas aún estaban a 25 kilómetros (25 millas) del centro de Kiev. Más temprano el jueves, el Ministerio de Defensa de Gran Bretaña dijo que un enorme convoy ruso se dirigía al sur hacia Kiev, avanzando lentamente, en parte debido a la resistencia, pero también debido a problemas logísticos.
Estados Unidos y Gran Bretaña anunciaron sanciones contra más oligarcas rusos el jueves, siguiendo las medidas de la Unión Europea, mientras aumentaban la presión sobre el Kremlin.
Más empresas, incluidas Google, el gigante del calzado Nike y la empresa sueca de muebles IKEA, cerraron o redujeron sus operaciones en Rusia a medida que las restricciones comerciales y de suministro aumentaron la presión política.
Airbnb anunció el jueves que suspenderá todas las operaciones en Rusia y Bielorrusia, un aliado de Moscú que facilitó la invasión rusa.
Biden dijo que las sanciones “realmente tuvieron un efecto profundo”.
Rusia describe sus acciones en Ucrania como una «operación especial» que no tiene como objetivo ocupar territorio sino derrocar al gobierno elegido democráticamente, destruir las capacidades militares de sus vecinos y arrestar a los que considera peligrosos nacionalistas. Niega haber tenido como objetivo a civiles.
El activista ruso de derechos humanos y ex campeón mundial de ajedrez Garry Kasparov ha pedido a los países occidentales que eliminen a Rusia de la agencia policial global Interpol e impongan una zona de exclusión aérea sobre Ucrania.
“Rusia debe regresar a la Edad de Piedra para garantizar que la industria del petróleo y el gas y cualquier otra industria sensible esencial para la supervivencia del régimen no pueda funcionar sin el apoyo tecnológico occidental”, dijo Kasparov.
– Con archivos de Reuters y The Associated Press
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