BARCELONA, España (AP) — El presidente de la Federación Española de Fútbol se enfrenta a una reunión de emergencia de su asamblea general el viernes en medio de informes de los medios de que presentará su renuncia tras un revuelo por su beso a la campeona de la Copa Mundial Femenina.
Se espera que Luis Rubiales comparezca ante las federaciones regionales, clubes, jugadores, entrenadores y árbitros de España en Madrid al mediodía, hora local, y los medios locales dicen que dimitirá.
La federación se negó a comentar sobre las repetidas solicitudes de The Associated Press para confirmar la decisión de Rubiales, que se informó el jueves por la noche.
Rubiales, de 46 años, está bajo una gran presión para dejar su puesto después de agarrar a la jugadora Jenny Hermozo y besarla en los labios sin su permiso durante una ceremonia de premiación tras la victoria de España por 1-0 sobre Inglaterra el domingo en Sydney, Australia.
La FIFA, el organismo rector mundial del fútbol y organizador de la Copa Mundial Femenina, abrió un caso disciplinario contra ella el jueves. Su comité disciplinario tuvo la tarea de sopesar si Rubiales violó su código de «reglas fundamentales de conducta decente» y «comportamiento que desprestigia al deporte del fútbol y/o a la FIFA».
Esa medida de la FIFA llevó al primer ministro en funciones de España, Pedro Sánchez, a pedir disculpas a Rubiales, que se produjo después de que insultara por primera vez a sus críticos, diciendo que no era convincente y que «debe seguir tomando medidas» para responsabilizarlo.
El Consejo Superior de Deportes de España, el organismo deportivo rector del país, ha prometido considerar rápidamente las diversas quejas formales presentadas contra él para ver si ha violado la ley deportiva española o el propio código de conducta de la confederación. De ser así, Rubiales será declarado no apto para ocupar su cargo por el tribunal rector del deporte de España.
Como si el beso obligatorio no fuera suficiente, Rubiales le agarró la entrepierna poco antes en un descarado gesto de victoria por parte de un grupo de dignatarios que incluía a la reina Letizia de España y a la princesa Sofía, de 16 años.
La combinación del gesto y el beso no solicitado convirtieron a Rubiales en un bochorno nacional después de que su comportamiento fuera difundido a nivel mundial, empañando el récord femenino de España.
Hermoso, el delantero de 33 años y contribuyente clave al título de España, dijo en una transmisión en las redes sociales: «No me gusta, pero ¿qué puedo hacer?». Sobre el beso durante la celebración en el vestuario inmediatamente después del incidente.
El primer intento de responder al escándalo fue un comunicado emitido a nombre de Hermoso, en el que restaba importancia al incidente. Más tarde, un informe de los medios locales del sitio web deportivo Relevo.com dijo que la federación la había obligado a hacer la declaración. La Federación se lo ha negado a Andhra Pradesh.
El miércoles, Hermoso emitió un comunicado a través del sindicato de jugadores, que dijo que hablaba en su nombre. El sindicato dijo que estaba haciendo todo lo posible para garantizar que el beso «quedara impune».
Rubiales no ha recibido el apoyo público de ninguna figura deportiva importante y partidos políticos unidos tanto de izquierda como de derecha están pidiendo su renuncia.
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Fútbol AP: https://apnews.com/hub/soccer
Cobertura de la Copa Mundial Femenina de Andhra: https://apnews.com/hub/fifa-womens-world-cup
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