NACIONES UNIDAS – El veto de Rusia el jueves puso fin al seguimiento de las sanciones de la ONU contra Corea del Norte por su programa nuclear, lo que desató acusaciones occidentales de que Moscú está tratando de evitar el escrutinio, ya que viola las sanciones impuestas por la compra de armas de Pyongyang para su guerra en Ucrania.
El cambio de Rusia en la supervisión de la ONU refleja cómo la creciente hostilidad de Moscú hacia Estados Unidos y sus aliados occidentales desde el comienzo de la guerra de Ucrania ha dificultado alcanzar un consenso incluso en cuestiones sobre las que se había acordado desde hace mucho tiempo.
El veto se produjo durante una votación sobre una resolución en el Consejo de Seguridad de la ONU que habría extendido el mandato del comité de expertos que supervisa las sanciones a Corea del Norte por un año, pero que ahora suspenderá su trabajo cuando su mandato actual expire a finales de Abril.
La votación en el consejo de 15 miembros, con 13 miembros a favor, Rusia en contra y China absteniéndose, no tuvo ningún impacto en las sanciones reales impuestas a Corea del Norte, que siguen en vigor.
Rusia nunca antes había intentado obstruir el trabajo del panel de expertos, que el Consejo de Seguridad de la ONU renueva anualmente durante 14 años y refleja la oposición global al creciente programa de armas nucleares de Corea del Norte.
El embajador de Rusia ante la ONU, Vasily Nebenzia, dijo al consejo antes de la votación que los países occidentales están tratando de «asfixiar» a Corea del Norte y que las sanciones están perdiendo su «relevancia» y están «desligadas de la realidad» para impedir la proliferación de armas nucleares en el país.
Acusó al comité de expertos de «convertirse cada vez más en un juguete en manos de los enfoques occidentales, reimprimiendo información sesgada y analizando titulares de periódicos y fotografías de mala calidad». Por lo tanto, dijo, «admite fundamentalmente su incapacidad para llegar a evaluaciones sensatas del estado del régimen de sanciones».
Pero el embajador adjunto de Estados Unidos, Robert Wood, describió el trabajo del comité como necesario y acusó a Rusia de intentar silenciar sus «investigaciones independientes y objetivas» porque «comenzó el año pasado a informar sobre flagrantes violaciones rusas de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU».
Advirtió que un veto ruso alentaría a Corea del Norte a seguir poniendo en peligro la seguridad global mediante el desarrollo de «misiles balísticos de largo alcance y esfuerzos para evadir sanciones».
El portavoz de seguridad nacional de la Casa Blanca, John Kirby, condenó el veto ruso como un «acto imprudente» que socava las sanciones a Corea del Norte, al tiempo que advirtió contra una profundización de la cooperación entre Corea del Norte y Rusia, especialmente porque Corea del Norte continúa suministrando armas a Rusia mientras lleva a cabo sus esfuerzos. Guerra en Ucrania.
«La comunidad internacional debe apoyar firmemente el régimen global de no proliferación y apoyar al pueblo de Ucrania mientras defiende su libertad e independencia contra la brutal agresión rusa», dijo Kirby a los periodistas.
La embajadora británica ante las Naciones Unidas, Barbara Woodward, dijo que el veto ruso se produce a raíz de acuerdos de armas entre Rusia y Corea del Norte en violación de las sanciones de la ONU, incluida «la transferencia de misiles balísticos, que Rusia luego utilizó en su invasión ilegal de Ucrania desde entonces». principios de este año”.
Y añadió: «Este veto no muestra preocupación por el pueblo norcoreano ni por la eficacia de las sanciones». Y añadió: «Se trata de que Rusia tenga la libertad de evadir y violar las sanciones para obtener armas para usar contra Ucrania».
«Este comité, a través de su trabajo para exponer el incumplimiento de las sanciones, ha sido una molestia para Rusia», dijo Woodward.
El embajador de Francia ante las Naciones Unidas, Nicolas de Rivière, añadió: “Corea del Norte está suministrando a Rusia materiales militares para apoyar su agresión contra Ucrania, en violación de muchas de las resoluciones por las que Rusia votó”.
El embajador adjunto de Rusia ante la ONU, Dmitry Polyansky, respondió calificando estas «insinuaciones infundadas» que «reforzaban nuestra convicción de que tomamos la decisión correcta de no apoyar la extensión del panel de expertos».
El Consejo de Seguridad impuso sanciones tras la primera explosión nuclear de Corea del Norte en 2006 y las ha endurecido a lo largo de los años en un total de 10 resoluciones que buscan -hasta ahora sin éxito- reducir fondos y frenar sus programas nuclear y de misiles.
El Consejo adoptó por última vez una resolución sobre sanciones en diciembre de 2017. China y Rusia vetaron una resolución patrocinada por Estados Unidos en mayo de 2022 que habría impuesto nuevas sanciones a una serie de lanzamientos de misiles balísticos intercontinentales.
El Consejo de Seguridad formó un comité para monitorear las sanciones y el mandato de su grupo de expertos para investigar las violaciones fue renovado por 14 años hasta el jueves.
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