«Todos tenemos que hacer nuestro mejor esfuerzo para no caer en esta crisis de salud que ha causado tanto sufrimiento», dijo Felipe.
El rey también recordó a los habitantes de la isla española de La Palma, en el Océano Atlántico, donde una erupción volcánica durante casi tres meses destruyó viviendas, infraestructura y cultivos, pero no dejó víctimas.
«Hoy, nuestros corazones y pensamientos permanecen con ustedes», dijo el rey a los isleños.
Ver la aparición anual del Rey en televisión antes de la cena de Nochebuena es un ritual anual en muchas familias españolas. En los últimos años, con la propagación de escándalos asociados con la familia real, los medios de comunicación y los comentaristas políticos han escudriñado su discurso en busca de indicios de la armonía del rey con el estado de ánimo de sus súbditos.
Pero no hubo una referencia directa a las circunstancias del padre de Felipe, el ex rey Juan Carlos I.
El ex monarca de 83 años se mudó a los Emiratos Árabes Unidos el año pasado después de que surgieran investigaciones judiciales sobre posibles irregularidades financieras. Aunque recientemente se suspendió una investigación suiza sobre lavado de dinero, los fiscales del Tribunal Supremo español aún están investigando las acusaciones.
Desde que asumió el trono en 2014, Felipe, de 53 años, ha intentado distanciarse de su padre.
En su discurso del viernes, el actual rey dijo que todas las instituciones estatales deben servir al pueblo.
“Debemos respetar y acatar las leyes y dar ejemplo de integridad y moral pública”, dijo Felipe.
___
Siga toda la cobertura pandémica de Associated Press en https://apnews.com/hub/coronavirus-pandemic
Associated Press
«Apasionado fanático del café. Amante de las redes sociales. Experto en Twitter. Practicante de música extrema. Adicto a los zombis. Especialista en viajes incondicional».
More Stories
La rivalidad entre Real Madrid y Bayern de Múnich: golpes, sellos, cinco años de sanción y una espada de verdad
Liga española: Barcelona vence al Atlético de Madrid y alcanza el segundo puesto
El gobierno español «supervisa» a la Federación de Fútbol, envuelta en un escándalo